La experiencia de un estudiante que termina

Mi recomendación para un estudiante que va a empezar la carrera es que acepte el desafío de ver a Dios en todas las esferas de su vida, tanto en la iglesia como en su universidad.  

 

Se acerca el final de curso y hay estudiantes que están apunto de terminar sus estudios. Nicolás Martínez es uno de ellos. Hoy compartimos la experiencia de este estudiante que termina. Estudió en Madrid economía y hoy charlamos con él sobre su etapa en la universidad, su relación con otros estudiantes cristianos en el grupo de GBU, sobre cómo llevar a cabo la misión… Estamos convencidos de que la experiencia de recién graduados, puede ser muy útil para estudiantes que empiezan o están en medio de sus carreras. Gracias Nicolás por contarnos tu historia en la universidad.

 

Explícanos brevemente quien eres, que has estudiado, dónde…

Mi nombre es Nicolás Martínez, nací en Quito (Ecuador) el 24 de marzo de 1998. Cuando tenía tres años vine a España con mi familia a un pequeño pueblo de Extremadura llamado Navalmoral de la Mata, donde pasé la mayor parte de mi niñez y adolescencia. Al terminar bachillerato decidí irme a Madrid a estudiar Economía en la Universidad Carlos III. Tras ello decidí ampliar mi formación cursando un Máster en Desarrollo Económico y Políticas Públicas en la Universidad Autónoma de Madrid, donde actualmente estoy.  

 

Si tuvieses que definir con una sola palabra tu etapa universitaria ¿cuál sería?

Diría que fue una aventura, por los grandes retos a los que tuve que enfrentarme al salir por primera vez de mi entorno familiar para emprender este nuevo desafío. Como toda buena aventura, estuvo lleno de momentos muy buenos y de otros menos agradables, pero de los que he podido aprender mucho, además de contar siempre con la compañía excepcional de amigos, que me llevo para toda la vida. Fue una etapa de aprendizaje continuo, donde cada nueva experiencia me ayudó a crecer en todas las áreas, y donde he podido ver directamente la mano de Dios obrando en mi vida.  

 

¿Has visto de alguna manera práctica a Dios trabajando en ti o tus compañeros durante estos cuatro años de estudio? ¿Nos podrías contar alguna historia sobre esto?

Absolutamente sí, cuando comienzas la etapa universitaria, todo se convierte en un desafío al que tienes que enfrentarte solo, fueron en esos momentos cuando pude ver con claridad a Dios obrando, tanto en cosas increíbles desde compañeros que me pedían que les hablara más de Dios o que les aconsejara sobre sus problemas desde mi perspectiva cristiana, como en detalles tan cotidianos que no hacían más que reforzar la idea de que Dios me había puesto en esa universidad con algún propósito.  

 

¿De qué manera te ha ayudado GBU?

GBU supuso un punto de inflexión en mi relación con Dios, un compromiso para honrarle en mi entorno de trabajo (la universidad) y poder vivir nuestra misión de compartir su mensaje manera activa. Fue un lugar donde pude aprender muchas cosas y donde pude desarrollarme como estudiante, pero ante todo como seguidor de Cristo. También conocí a muchos otros estudiantes con el mismo anhelo de servir a Dios, enriqueciendo mucho mi fe y reforzando la idea de que debemos ser luz a todo lugar al que vayamos.  

 

Ahora que acabas de graduarte ¿qué recomendación le darías a un estudiante que empieza la carrera?

Mi recomendación es que contacte con su grupo de GBU más cercano, y que disfrute de esta nueva etapa, pero ante todo que acepte el desafío de ver a Dios en todas las esferas de su vida, tanto en la iglesia como en su universidad.  

 

En GBU os animamos a ver vuestros estudios y vuestro tiempo en la universidad como una oportunidad para la misión. ¿Crees que lo que has aprendido en este tiempo te será útil en tu siguiente etapa? ¿De qué forma? ¿De qué forma el evangelio podría transformar tu disciplina académica? ¿Qué retos te llevas para ser un seguidor de Jesús en tu campo? 

El modo en que GBU me ha hecho plantearme la misión ha cambiado por completo mi manera de ver el mundo, convirtiendo este concepto que muchas veces creemos muy lejano en algo tan cotidiano como ir a clase y hablar con tus compañeros. Este nuevo concepto de misión ha hecho ampliar mi campo a todas las áreas de mi vida, pudiendo trasladar la misión a todas las nuevas etapas que empiezo. Los retos que me llevo de mi etapa universitaria son los de llevar el mensaje de Jesús a todos los lugares a los que vaya. También el ser valiente y confiar en que Dios es más grande que todas las circunstancias a las que nos podamos enfrentar y que siempre está con nosotros.  

 

Los retos que me llevo de mi etapa universitaria son los de llevar el mensaje de Jesús a todos los lugares a los que vaya.

 

Estamos muy agradecidos a Dios de que use los grupos de GBU en la Universidad para estimular, animar e impulsar a los estudiantes a vivir la misión en todas los ámbitos de la vida. Oramos por los estudiantes que terminan sus carreras y que ahora comienzan una nueva etapa en el mundo laboral. También oramos por todos los estudiantes que llegarán en septiembre a la Universidad.

 

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