La experiencia de estudiar la Palabra de Dios con amigas que nunca la habían leído, ha sido de mucha bendición para mi vida, y supongo que para la de ellas también. Ver cómo el Señor obra a través de la gente y lo tiene todo bajo control ha hecho crecer mi fe y he podido conocerle mejor. Me ha vuelto a dejar sorprendida y me he dado cuenta que da igual cómo seamos y las cualidades y defectos que tengamos, el Señor nos usa y nos capacita. Porque él es todopoderoso, así que da igual que nosotros pensemos que no podemos o no somos capaces de llevar la Palabra a quienes no la conocen, si nos ponemos en sus manos él nos va guiando. El Señor, durante mis dos primeros años en la universidad, ha hecho posible que dos de mis compañeras de clase se interesen por conocer a Jesús.
En el primer curso conocí a María. Empezamos a conocernos mejor durante el segundo semestre y mediante conversaciones cotidianas, en las que nos explicábamos lo que íbamos a hacer durante la semana, ella escuchaba mis actividades relacionadas con Dios (ir a la iglesia, ir al estudio bíblico, juntarme con los jóvenes de la iglesia, etc.) y empezó a interesarse por el tema preguntándome sus dudas. Un día en el tren me explicó un tema personal que le preocupaba y le aconsejé que se lo explicara a Dios y le pidiera paz ya que era algo que a mí me ayudaba y estaba segura de que también le ayudaría a ella. Después le aconsejé leer la Biblia y aceptó, así que le propuse hacerlo juntas y le gustó más la idea. Así empezamos a quedar, una vez por semana, a comer en la universidad para luego hacer una evidencia de Uncover y conocer poco a poco al Señor. Además se animó a participar en los núcleos semanales en nuestro campus y ya lleva un año y medio asistiendo.
Hablando con ella me ha comentado que su interés por conocer la Palabra empezó debido a la curiosidad que sentía por estudiarla de una manera diferente a las típicas que ella conocía, que era en la clase de religión y que le parecían muy rígidas a veces. Dice que lo que más le ha sorprendido de la Biblia es el hecho de que sea un conjunto de libros diferentes y que éstos tengan mucho más que ver con nosotros mismos de lo que pensamos, además no sabía que fuera tan práctica. El material de Uncover piensa que ha sido muy bien escogido porque trata fragmentos muy representativos y fáciles de entender en comparación con otros, y que además, la explicación del contexto social y las preguntas guía ayudan mucho. María me dijo: «He descubierto que Dios está más cerca de nosotros de lo que pensamos, y si al principio de hacer Uncover dudaba de su existencia, ahora ya no. He dejado de pensar en él como un ente lejano y dudoso para verlo como un amigo y compañero en el viaje de la vida». Acabamos las lecciones y no dejó de asistir al núcleo. También vino un par de veces a la iglesia y le gustó muchísimo. El Señor está obrando en su vida y a mí me ha dado el privilegio de poder compartirlo con ella. Como anécdota curiosa, una de las veces que quedamos para hacer una evidencia en el bar, se acercó un compañero de clase a nosotras y se sentó a nuestro lado de manera que hicimos algunas preguntas guías con él. Le ofrecí una Biblia y la rechazó. Días después me preguntó si todavía podía y quería regalársela, así que se la di. No quiso volver a hacer Uncover, pero dice que la está leyendo por su cuenta, y eso ya es un milagro.
Cuando empecé el segundo año de carrera, conocí a Lorena ya que coincidíamos en la mayoría de asignaturas del semestre. De forma natural, igual que con María, surgía el tema de mi vida como cristiana y a ella le interesó ya que por lo general suele tener curiosidad por las distintas religiones. Al acabar el semestre y empezar las nuevas asignaturas no coincidimos en ninguna, lo que suponía un problema para vernos y hablar como antes. Estando en la Asamblea General de GBU de este año 2016, dijeron algo sobre animar a nuestros amigos a hacer Uncover y de golpe, pensé que no se lo había propuesto a Lorena todavía. Así que le envié un WhatsApp preguntándole si quería estudiar la Biblia conmigo y así nos veríamos de nuevo más a menudo. Ella aceptó y así empezamos algunas semanas. Hasta el día de hoy hemos hecho 4 evidencias y tenemos la intención de seguir quedando. Ella dice que le ha sorprendido todo lo que hemos leído de la Biblia porque no la había leído nunca y hay cosas muy sorprendentes para ella como por ejemplo cuando Jesús ayuda y cura al paralítico. Dice que Uncover le está ayudando a tener otra idea distinta sobre el evangelismo, mejor que la que tenía antes. Me dijo: «Mi idea sobre Dios es buena y siempre lo ha sido. Sabía que es bueno pero no sabía lo milagroso que es. De las historias que me has explicado me he quedado muy sorpendida de todo lo que ha hecho«.
Sheila Ojeda, estudiante de GBU, es la que nos cuenta como está desarrollando la misión allí donde el Señor la ha puesto, en su campus.
