afrontar el duelo en cuarentena

 

En estos tiempos tan difíciles, el psicólogo Josep Araguàs nos proporciona algunas claves para afrontar el proceso de duelo.

El tema emocional es cómo hacer frente a dicho proceso, ya de por sí complicado, sin poder estar presentes; ya que se elimina una parte importante, que es la despedida y el funeral.

En estos casos, a ser posible, se tendría que intentar utilizar el teléfono móvil o algún dispositivo electrónico que nos acercara la voz o la imagen de la persona.

Todos sabemos que el peor sufrimiento es aquel que ocurre en aislamiento y soledad. En la familia puede dejar fundamentalmente angustia y culpa (el sentimiento del todo injustificado). Puede haber una lucha entre lo racional y sensato (que es cumplir la ordenanza de no acudir en estos momentos) y lo emocional (que supone acompañar a las personas amadas hasta el final). Poder verbalizar esta lucha en un contexto pastoral, puede liberar mucha tensión y dolor.

Siempre he aconsejado no quedarse con la supuesta «última imagen» de la persona fallecida en agonía, sino con todo lo que ella ha sido para nosotros (sus logros, sus risas, su amor, su fe…). Quedarse con el final puede resultar muy doloroso e incluso con riesgo de obsesión.

Hay dos pasajes bíblicos que nos pueden dar cierta luz:

  • La figurada muerte del patriarca José: en Gn. 37:34-35 se nos describe el duelo y el dolor de Jacob al reconocer las vestimentas ensangrentadas de su hijo.
  • La muerte de Moisés: en Dt. 34:8, a pesar de que el cuerpo de Moisés no aparece, el pueblo «llora» a Moisés durante 30 días.

Me decía hace algún tiempo el pastor de la iglesia de Marín (Julio Torres) que fallecieron dos hermanos de la congregación que eran marineros. Su cuerpo no se encontró nunca. Al cabo de dos años, «la ley del mar» permite dar a la persona por fallecida. Fue entonces cuando, por medio de fotografías, se hizo un acto de despedida en la iglesia y fue de mucho alivio para las familias.

Creo que aunque el cuerpo no esté presente, la familia debe llorar y poder despedir a la persona.

 

 

Otras lecturas que nos pueden ayudar estos días:

 

Foto: Kristina Tripkovic en Unsplash